El cambio necesita ser visible para ser cambio.
Así lo entendieron y lo llevaron a cabo un grupo de mujeres que escribían, pintaban, componían y esculpían bajo la sombra de intelectuales masculinos.
Maruja Mallo, la explica de la siguiente manera: "Un día se nos ocurrió a Federico, a Dalí, a Margarita Manso y a mí quitarnos el sombrero porque decíamos que parecía que estábamos congestionando las ideas y, atravesando la Puerta del Sol, nos apedrearon llamándonos de todo".
Éstas mujeres españolas del 27 reivindicaron su papel intelectual no solo sobre su propia figura, sino sobre la vida cultural que las rodeaba. Empiezan a imponerse palabras como "autora", "escritora", "pintora"...
La mujer se convierte en un personaje pictórico y literario fuerte, manifestando, que lucha contra su destino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario